San Roque

Cepsa invierte más de 42 millones de euros para reforzar la eficiencia, tecnología y seguridad de la refinería

Trabajadores, durante la parada.
Ha concluido la parada programada en el complejo industrial sanroqueño tras un mes y medio de intenso trabajo; han participado más de 600 profesionales de 25 empresas auxiliares, la mayoría de ellas del Campo de Gibraltar

La Refinería Gibraltar-San Roque de Cepsa ha concluido su parada programada. Tras un mes y medio de intenso trabajo, todas las unidades de la Refinería Gibraltar-San Roque de Cepsa que se han visto implicadas por la parada se encuentran ya a pleno rendimiento. Durante la parada, que no ha registrado ningún accidente con baja fruto del compromiso de Cepsa con la seguridad, se han llevado a cabo labores de mantenimiento, inspección reglamentaria e instalación de nuevos equipos en algunas unidades destinados a mejorar la seguridad, la disminución de las emisiones a la atmósfera, la eficiencia y el nivel de innovación y tecnología de las plantas. Unos trabajos de mejora que han supuesto una inversión de 42,6 millones de euros.

Durante el desarrollo de todos los trabajos, junto al personal propio de Cepsa, han participado más de 600 profesionales (mécanicos, tuberos, electricistas, soldadores, pintores, encofradores, gruistas y carretilleros) de 25 empresas auxiliares, principalmente del Campo de Gibraltar.

El director de la Refinería Gibraltar-San Roque de Cepsa, José Antonio Agüera, ha agradecido el esfuerzo y la dedicación a todas las personas implicadas con la parada y, de manera especial, el compromiso con la seguridad y con las medidas COVID.

Previamente a la entrada al recinto, toda persona que ha colaborado con los trabajos recibe un curso sobre seguridad y prevención por Cepsa que se suma a la formación facilitada por sus respectivas empresas, además de tener que cumplir con los protocolos de seguridad que ha impuesto la COVID-19.

De manera habitual, Cepsa realiza paradas programadas de sus unidades, donde se efectúan labores de mantenimiento intensivo e inspecciones que, normalmente, no se pueden hacer con las unidades en marcha. Los trabajos permiten a Cepsa contar con unas instalaciones modernas, seguras, eficientes y con una capacidad técnica integrada.

La parada requiere una detallada planificación durante los meses previos, con reuniones entre los departamentos y las empresas auxiliares. La coordinación, junto al riguroso control de las tareas diarias, resulta esencial para garantizar la seguridad de las personas y de las instalaciones, sin afectación para el medio ambiente y la consecución del objetivo de cero accidentes por el que trabaja Cepsa.