Una mano que sujeta las tres llaves de Tarifa, una copia exacta de las llaves del escudo de la ciudad, es el elemento destacado de la escultura que ya preside la rotonda de entrada a Tarifa. La mano está enmarcada por un anillo metálico que otorga gran profundidad a la obra y que simboliza el compromiso. La mano, esculpida por el artista Tomás Castillo, es todo un símbolo de acogida, un significado que el autor ha entendido como merecido para una ciudad cosmopolita como Tarifa.
El conjunto escultórico ha sido creado con metal y fibra, y es una talla directa, por lo cual el autor tuvo que encontrar un lugar de dimensiones apropiadas para su realización. El artista tarifeño ha necesitado cinco meses para terminarla y ha apuntado al diseño y al estudio de la estrategia de realización como los momentos más difíciles de un autor.
El resultado ha sido de la satisfacción de todos los presentes hoy durante el acto de inauguración del monumento. El alcalde de Tarifa, Francisco Ruiz Giráldez, y el escultor han sido los encargados de destapar la obra y sorprender así a todos los testigos.
Ruiz Giráldez ha destacado que el proyecto de Tomás Castillo encajó muy bien con el objetivo del Ayuntamiento de Tarifa, con el concepto que había sido puesto como referente. Y es así como el resultado ha impresionado tanto, "porque además de responder a la idea predeterminada, vemos la impronta, el sello del autor en la obra", ha señalado el alcalde tarifeño.
La entrada este a la ciudad de Tarifa ha sido objeto de remodelaciones y reformas varias durante los últimos meses. Así, se ha aumentado el acerado y las luminarias en toda la superficie o camino que media entre la nueva rotonda de la Nacional 340 y la rotonda del monumento. Ello otorga singularidad e importancia a una zona de Tarifa que ahora se ve más realzada aún. El Gobierno tarifeño entiende que la obra artística de Tomás Castillo supone una culminación a un trabajo que ha querido dar el realce necesario a esta entrada a la ciudad.
